Más de una vez durante la pretemporada, Jones ha mencionado la "ósmosis" de Schottenheimer. Aprendiendo. Pero esta temporada sucederán cosas para las que no está preparado.

Brian Callahan, hijo de Bill, fue entrenador en jefe en su primer año el año pasado con los Tennessee Titans.

"Es un asunto de personas y uno se ocupa de los problemas de la gente", dijo Callahan durante un descanso en los entrenamientos del East-West Shrine Game en marzo. "A veces es tan simple como que alguien tiene una muerte en la familia y tiene que irse, o alguien tiene problemas con los que lidiar. La mayor diferencia para mí, como entrenador asistente, es que recibes la información y simplemente sigues adelante.

"Como entrenador en jefe, tienes que manejar todo eso. Hablas con el personal de seguridad, el equipo de interacción con los jugadores. Hay estas conversaciones iniciales y luego hay que tener unas siete más. Hablas con el gerente general. Así que hay una serie constante de cosas por las que tienes que pasar, y que como asistente nunca tienes que hacer”.

Schottenheimer cree que sus tres años de experiencia en la organización (uno como consultor y dos como coordinador ofensivo del exentrenador Mike McCarthy) le dan una ventaja sobre la mayoría de los entrenadores primerizos.

"Conozco todos los detalles", reconoció Schottenheimer. "Hablando con otros entrenadores principales primerizos, si necesitan concretar algo desde el punto de vista contractual, se están aprendiendo los nombres. Si tienen que concretar algo con viajes, se están aprendiendo: '¿A quién recurro?'. Conozco a toda esa gente".

En cuanto al plan de juego, Callahan afirmó que una vez que cumpliera con sus obligaciones con los medios el lunes, cerraría la puerta para centrarse en el plan de juego de la semana siguiente.

"Tu tiempo es muy limitado", dijo Callahan. "Tienes que aprender cuándo dejar a todos fuera por un tiempo para poder concentrarte en la parte del plan de juego. Pero luego necesitas tener buena gente a tu alrededor. Cuento con un buen equipo de jugadores que hacen un trabajo excelente, así que se encargan de que todo siga avanzando, y yo me incorporo cuando tengo tiempo”.

Dave Canales fue el entrenador en jefe de primer año de los Carolina Panthers en 2024. Además de aportar su propia cultura al vestuario, también les enseñaba su sistema ofensivo a los jugadores.

Se encontró confiando en el coordinador ofensivo Brad Idzik y el coordinador defensivo Ejiro Evero "para que todo siga avanzando", indicó Canales en el Combinado de Talentos de la NFL.

"De esa manera, puedo integrarme en las diferentes áreas de nuestro equipo y asegurarme de, como mínimo, impactar la cultura y el ambiente que buscamos, y que estamos emocionados de estar aquí, y se lo demostramos a estos jugadores con entusiasmo porque entenderán cómo avanzamos".

Callahan y Canales mencionaron la gestión del juego como un aspecto importante de sus trabajos que necesitaba un ajuste. Canales tiene a George Li como coordinador de gestión del juego de los Panthers. Vieron juntos los partidos de playoffs el año pasado para repasarlos. Escenarios al final de la mitad y del partido, así como cuándo usar la bandera de desafío.

"Me está acribillando con diferentes situaciones que surgen a lo largo de la semana", señaló Canales. "Me sentí protegido por él, quien me avisó sobre posibles situaciones para que pudiera concentrarme en la siguiente decisión. Ciertamente, cuando estamos a la defensiva, hay un diálogo más abierto sobre esos temas, pero me apoyo en George".

Para Schottenheimer, esa persona es Ryan Feder, uno de los jugadores que se quedaron del cuerpo técnico de McCarthy. Fue entrenador asistente de mariscales de campo el año pasado con responsabilidades de gestión de juego, pero ahora ostenta el cargo de coordinador de gestión de juego bajo la dirección de Schottenheimer.

Schottenheimer calificó a Feder como un "asesor de confianza".

"Creo que lo hace tan bien como cualquiera en el sector. El día del partido, necesitas una voz que se escuche. Porque, obviamente, estas cosas ocurren en momentos críticos y tensos, y cosas así", dijo Schottenheimer. "Así que tener esa voz, la de alguien en quien tienes plena confianza, realmente importa".

Schottenheimer agregó que escuchará a todos: jugadores, asistentes, otros entrenadores principales, pero eso no significa que siempre implementará lo que le dicen.

"Hablas con la gente todo el tiempo. He estado pensando en esto toda mi vida como profesional, en lo que quería hacer", manifestó Schottenheimer. "Pero surgen cosas todos los días y desearía que mi padre todavía estuviera aquí; me comunicaría con él. Pero, ya sabes, los entrenadores de toda la liga, pasando tiempo con ellos en las reuniones de la liga, fueron geniales. Todos eran entrenadores principales primerizos.

"Creo que una de las cosas que sucede es que cuando construyes relaciones como las que he construido a lo largo de mi carrera e intentas hacer las cosas bien, estos chicos están abiertos y dispuestos a ayudar, y eso es genial".