Cuando el partido entraba en el momento crucial y con los Pacers arriba en el marcador, apareció el héroe, Shai Gilgeous-Alexander y se encargó de silenciar al rival. 2n3n4j
Shai Gilgeous-Alexander tiene una costumbre: la de aparecer y hacer la diferencia cuando su equipo más lo necesita.
Con la necesidad de ganarle el cuarto juego a Indiana Pacers para empatar la serie y retomar la ventaja de localía, el más valioso de la temporada volvió a demostrar su linaje convirtiéndose en el Héroe del partido: 35 puntos con 12 de 24 en tiros de cancha, 10 de 10 en tiros libres, 3 robos y un tapón lo certifican.
Cuando al partido le quedaba 5:03 minutos por jugarse y con los Pacers arriba en el marcador por 97 a 95, Shai se encargó de silenciar el estadio. En dicho lapso anotó 15 de los 16 puntos restantes y le ganó el parcial a todo el equipo rival por 15 a 7. Y lo consiguió después de tener que aguantar la marca asfixiante y cuerpo a cuerpo que le plantearon entre Andrew y Aaron Nesmith durante los 40 minutos que estuvo en cancha.
Sus 35 puntos del juego 4 son su segunda mejor marca anotadora en estas finales luego de los 38 que anotó en el primero. Con la sola excepción del tercer partido en el que “apenas” llegó a 24, sus marcas siempre superaron las 30 unidades.
En las finales lleva anotados 131 de los 451 puntos del OKC Thunder (29%) y su promedio por juego es de 32.7 por partido.
Sus números de los últimos 5 minutos del partido y de toda la serie se dicen fácil. Tan fácil como su capacidad para vestirse de héroe y seguir liderando la ilusión de Oklahoma City Thunder de ganar el título.