El flamante bateador designado de Boston es uno de los bateadores más productivos del 2025, mientras su equipo no da señales de que será competitivo en la temporada. 1j1s4d
Hasta el momento en que se escriben estas líneas, Boston Red Sox ha sido una de las decepciones de la temporada 2025 de las Grandes Ligas.
Probablemente uno de los equipos sobre los que más expectativas había al iniciar la campaña, luego de una movida temporada baja en la que se hicieron con los servicios de algunos de los agentes libres más importantes del mercado, como Alex Bregman y Walker Buehler, mientras contaban con una de las mejores fincas de talento en ligas menores, acentuada por la presencia de tres prospectos de los cuales se esperaba su debut en algún momento del año, Boston se vio como una de las organizaciones que más había mejorado de cara a 2025.
Adelantándonos al presente, las cosas no han salido, en prácticamente ninguna forma, como se esperaba.
El año inició con una tumultuosa y muy pública discusión sobre el futuro de Rafael Devers, quien fue cambiado de posición y convertido en el bateador designado a tiempo completo del equipo, seguida de otra discusión en la que Devers señaló que no estaba en disposición de jugar primera base, luego de que Triston Casas sufriera una lesión que lo mantendrá fuera por el resto del año.
Sin embargo, en el particular caso de Devers, una vez aceptó ser designado a tiempo completo y se adecuó a su nuevo rol, ha sido el bateador más productivo de los Red Sox y en palabras del propio Alex Cora, dirigente de Red Sox, y con las que estamos totalmente de acuerdo, ha sido el mejor bateador designado de la Liga Americana.
Tras irse en blanco en sus primeros cinco juegos y poncharse en 15 de sus primeros 19 turnos oficiales, Devers ha dado la vuelta a su temporada y se convirtió en uno de los bateadores más productivos de MLB.
Desde el 2 de abril a la fecha, Devers batea para .301 con OPS de .977, 14 jonrones, 56 remolcadas, 46 anotadas, 50 transferencias negociadas y 57 ponches. En el mismo tramo, los Red Sox tienen para mostrar un récord de 32 ganados e igual número de perdidos.
El récord general de Boston en el año es 33 ganados y 36 perdidos, ocupando el cuarto puesto en el este de la Liga Americana, pero, si Devers está bateando consistentemente, ¿cuál es el problema del equipo? Los Red Sox simplemente no han sido un buen equipo en múltiples departamentos, a pesar del gran año de Devers.
Tienen 17 derrotas en partidos que se han definido por una sola carrera, lideran MLB en errores defensivos por tercer año consecutivo con 61, sus lanzadores tienen una efectividad colectiva de 4.10 y un promedio de hits y bases por bolas por entrada lanzada (WHIP) de 1.34, números que empeoran cuando se ve el trabajo que ha hecho la rotación abridora del equipo, una de las que menos innings ha trabajado en la temporada.
Los abridores de Boston se combinan para una efectividad promedio de 4.73 en 78 salidas, así como un WHIP de 1.45. La única excepción a lo mal que han estado los abridores de los Red Sox es Garrett Crochet, quien básicamente lidera todos los departamentos de picheo.
En resumidas cuentas, a pesar del gran año que Rafael Devers está teniendo con Boston, es tanto lo que está saliendo mal para el equipo que su contribución no es suficiente para sacar a flote al combinado.